martes, 29 de septiembre de 2015

29 de Setiembre: DÍA DE LOS SANTOS ARCÁNGELES: MIGUEL, GABRIEL, RAFAEL Y URIEL

En el Cristianismo, los arcángeles son una categoría de ángeles. Constituyen uno de los nueve coros de la jerarquía angelical. Los arcángeles son los penúltimos, antes de los propios ángeles (tal y como lo indica el prefijo arc, que significa superior).
Los siete nombres aceptados por la Iglesia Católica (se cree en los otros cuatro, pero no se saben los nombres reales) son:
  • Miguel, jefe del ejército celestial,
  • Gabriel, el mensajero celestial,
  • Rafael, protector de los viajeros, de la salud y del noviazgo.
  • Uriel, encargado de las tierras y de los templos de Dios.
Según el Canon bíblico (excluyendo el texto apócrifo), solo se llama arcángel a Miguel, y Gabriel es un ángel mensajero. Sólo se menciona a Rafael en el Libro de Tobías, que es deuterocanónico, por lo que es reconocido por las comunidades judías de la Diáspora, por todas las iglesias cristianas ortodoxas, y también por la iglesia católica romana, pero ha sido rechazado por los judíos rabínicos jerosolimitanos y por los protestantes.

Bendito sean los 7 Arcángeles que cantan alabanzas al Creador, Invoco su presencia para mantenerme fiel al plan Divino de la Creación. Para que entren en cada hogar y enciendan la llama de Dios en nuestros corazones.
Arcángel Miguel, Angel de la protección y de la liberación, envuelve la Tierra con la energía del Amor: Que en cada hogar se sienta el poder y la presencia de Dios. Libéranos del temor, de la duda y de la confusión, llévanos a la Luz, a la Felicidad Divina.
Arcángel Gabriel. Angel de la purificación. Envuélveme en tu manto de Luz Blanca de alegría y confianza, aleja la depresión convirtiéndola en optimismo y el fracaso en victoria. Derrama sobre mi la abundancia.
Arcángel Rafael, Angel de la verdad y la curación, cúbrenos con el poderoso manto de tu Luz. Mantén la perfecta actividad de cada órgano y célula de mi cuerpo. Sana mi ser de la enfermedad, cúbreme de Amor Divino.
Arcángel Uriel, Angel de la providencia y de la abundancia, bendice la presencia Divina en mi y en todo lo que me rodea, bendice todo lo que hago, digo y pienso. Mi mundo cuenta con la Bendición de Dios y sus Angeles.

Queridos Arcángeles: Que la Luz del Señor alcance  nuestros corazones y nos bendiga con la PAZ tan anhelada. AMÉN.

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